Hamburguesa vegana de remolacha y garbanzos
Cuando buscamos perder peso solemos ver a las hamburguesas como un alimento prohibido. Probablemente porque las relacionamos con chorretones de grasa, litros de salsa o cantidades exageradas de queso. Es cierto que ese tipo de hamburguesa no es la mejor opción, pero hay muchas otras que pueden perfectamente formar parte de cualquier dieta. Hoy te hablaremos de la hamburguesa vegana de remolacha y garbanzos, una opción de hamburguesa vegetal muy sana, además de deliciosa. Este es uno de los platos que puede incluirse en nuestros planes de dieta personalizados, como los planes de dieta para adelgazar 15 kilos.
Tipo: Plato principal
Cocina: Mediterránea
Palabras clave: Hamburguesa vegana de remolacha y garbanzos
Rendimiento de la receta: 2 personas
Tiempo de preparación: 5M
Tiempo de cocinado: 40M
Tiempo total: 45M
Ingredientes de la receta:
- 110 gr de garbanzos cocidos
- 75 gr de remolacha cruda
- 30 gr de quinoa
- 100 gr de champiñones
- ½ cebolla (50 gr)
- 1 diente de ajo
- 1/8 cdta de comino (opcional)
- 1- 2 cdas de parmesano rallado
- 2 cda de chía (remojo)
- ¼ cdta de pimentón ahumado
- 30 gr de copos de avena
- Aceite de oliva virgen
- ½ cdta de sal
- Pizca de pimienta molida
- Un toque de ralladura de lima
Instrucciones de la receta:
Primer paso:
Para hacer las hamburguesas empezamos cocinando la quinoa. Como siempre cuando se trata de este cereal, tenemos que lavarlo bajo el grifo para quitar la saponina (si no la quitamos amarga un poco). Para conseguirlo le daremos unas vueltas en el colador bajo el grifo hasta que deje de hacer espuma. Una vez lavada, la cocinaremos unos 15 minutos en una olla con agua y un poco de sal.
Segundo paso:
Mientras se cocina la quinoa, seguiremos preparando el resto de la hamburguesa. Para empezar, ponemos las semillas de chía a remojo con agua para que se hidraten. La chía es lo que usaremos para sustituir al huevo, pero si no tienes chía y no te molesta el huevo, puedes añadir uno en vez de las semillas de chía.
Tercer paso:
Continuamos picando la cebolla y el ajo en cuadritos pequeños, y los ponemos a sofreír en una sartén con un chorrito de aceite de oliva virgen (AOVE) a fuego medio-alto. A continuación seguimos con los champiñones. Puedes picarlos o pasarlos por el rallador (la idea es que no queden en trozos grandes), y cuando los tengas los añadimos a la sartén en la que la cebolla y el ajo ya habrán cogido algo de color.
Cuarto paso:
Ahora vamos con los garbanzos que tendremos escurridos. Los tenemos que machacar con un tenedor, pero no hay que llegar al punto de que queden hechos una pasta, deben tener algo de cuerpo para que puedan darle textura a la hamburguesa. Una vez hecho, añadimos los garbanzos aplastados a la sartén cuando los champiñones ya estén algo dorados. Lo mezclamos y seguimos un par de minutos más con ambos ingredientes en el fuego para que todo vaya perdiendo algo de humedad.
Quinto paso:
En este punto la quinoa ya tiene que estar, así que la vamos a sacar de la olla. La volcamos sobre un colador y dejamos que se enfríe un poco y que pierda humedad. Si hace falta, removemos de vez en cuando para que se vaya secando. Mientras tanto volvemos a la sartén, bajamos el fuego y vamos añadiendo más ingredientes: salpimentamos, añadimos el comino y el queso rallado (si eres intolerante a la lactosa, cambia este ingrediente por levadura nutricional). Ahora rallamos la remolacha y, si quedan muy grandes los trocitos, las picaremos a cuchillo para que luego no nos cueste que se quede todo unido. Añadimos la remolacha a la sartén y damos unas vueltas para que todo quede homogéneo.
Sexto paso:
Lo sacamos todo del fuego y lo volcamos en un bol para seguir mezclando. Ahora añadimos los copos de avena, una cucharada de aceite de oliva, el pimentón ahumado (esto es opcional, pero le da un toque a parrilla muy bueno). Por último, probaremos cómo está de sal y pimienta. En este paso también podemos añadir alguna hierba más, como cilantro, orégano, etc. Cuando lo tengamos todo lo mezclamos todo bien y lo dejamos tapado en el refrigerador durante media hora o más. Podemos dejar la masa hasta veinticuatro horas, aunque si hemos añadido huevo en vez de semillas de chía, tenemos que tener cuidado con que no se pierda la cadena de frío.
Séptimo paso:
Pasado este tiempo, hacemos pequeñas bolas. Cuando las tengas, forma las hamburguesas aplastando esas bolas. Una vez hechas, las cocinaremos en una sartén a fuego medio con un toque de aceite de oliva virgen. Debes freírlas durante 3-4 minutos por cada lado, estando pendiente de darles la vuelta. Y ya está. Las colocamos sobre nuestro pan favorito, ¡y a comer! Otra manera de preparar esta receta es introduciendo los ingredientes en un robot de cocina, que se encargará de hacer la masa por sí mismo. Los ingredientes se triturarán en el vaso de la batidora tras
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