Hoy en día la vida va acelerada, cada vez tenemos menos tiempo, vamos corriendo a todos los sitios y tenemos la sensación de que no llegamos a todo. Esto afecta a nuestro organismo, a cómo nos sentimos y sobre todo a nuestra salud. Vivimos en un estrés continuo que no nos permite cuidarnos y dejar tiempo para dedicar a nosotros y disfrutar de tiempo libre para pasar con familia y amigos, lo que ha provocado una disminución en nuestra calidad de vida, pero, ¿realmente invertimos todo nuestro tiempo libre o el problema está en que no sabemos organizarnos bien?

La respuesta está en que muchas veces organizarse implica esforzarse en cambiar algunas cosas, establecer otras rutinas y hábitos a los que no estamos acostumbrados, pero sin duda merece la pena y te vamos a dar unos consejos para ayudarte a cambiar tu día a día para aprovechar al máximo el tiempo y que puedas llevar una vida más ordenada y saludable.

Establecer una rutina te ayudará a organizarte y a simplificar la semana, tener un orden, unos horarios, etc, hará que puedas ser constante en todo lo que hagas, te afectará positivamente en la salud, en el trabajo y en la conciliación familiar, así que vamos a ver diferentes ámbitos en los que podemos darte algunos consejos para mejorar tu día a día. Si lo necesitas, también puedes ayudarte con algunas dietas para adelgazar.

Planificación de comidas

El primer consejo es intentar tener planificada la alimentación de toda la semana. Para eso es importante tener en cuenta los siguientes puntos:

• Crea tu menú semanal, estableciendo qué comer cada día, analiza qué tipos de comidas te gustan a ti y al resto de tu familia para elaborar un menú que os guste a todos, tratando de elegir platos saludables y que sean rápidos de elaborar y  sencillos, eso te facilitará mucho.
• Revisar qué ingredientes tienes en la nevera para intentar incluirlos en el menú y así evitar que se deterioren y terminar tirándose, puedes hacer adaptaciones de las recetas para aprovecharlos, hay que ser flexibles en los ingredientes.
• Hacer una lista con los ingredientes que necesitas para evitar comprar de más y asegurarte de que tienes todos los ingredientes a la hora de preparar los platos.
• Establece un día para hacer la compra de la semana. Al tener los ingredientes anotados, evitarás olvidos y visitarás el supermercado varias veces, lo que también te ayudará a ahorrar, ya que cada vez que vamos a comprar, siempre acabamos comprando más cosas de las que necesitamos.

Estrategias nutricionales

Algunas de las estrategias nutricionales que puedes seguir y que te ayudarán a tener una alimentación saludable son:

• Dieta equilibrada: incluir variedad de alimentos de todos los grupos, incluyendo frutas, verduras, cereales, carnes magras, pescados, legumbres y grasas saludables, y así asegurar un aporte necesario de nutrientes para mantener una buena salud y prevenir malnutrición.
• Mantener una buena hidratación: asegurarse de beber suficiente agua a lo largo de todo el día es importante, ya que nuestro organismo necesita tener una hidratación óptima para realizar funciones esenciales.
• Controlar cantidades: Intentar mantener un equilibrio entre la energía que tu cuerpo necesita o la que gastamos y la energía que ingerimos con los alimentos para mantener un peso saludable, también puedes recurrir a la ayuda de un nutricionista profesional para que te asesore y te elabore una dieta personalizada para asegurarte de que es equilibrada.
• Eliminar o limitar al máximo el consumo de azúcares añadidos y alimentos procesados: el exceso de azúcar puede provocar diabetes tipo 2, obesidad y enfermedades cardíacas y no aporta nutrientes de calidad.
• Consumir fibra: incluir en la dieta diaria alimentos ricos en fibra puede reducir el riesgo de padecer diferentes enfermedades, así como ayuda a mejorar la salud intestinal, disminuyendo también el riesgo de padecer cáncer colorrectal y los niveles de colesterol.
• Incluir grasas saludables: los aguacates, frutos secos, semillas y pescados grasos con alimentos ricos en grasas saludables que ayudan a mantener la salud del corazón y permiten el desarrollo y actividad cerebral, regulan la inflamación y protegen los órganos.

Por otro lado, también cabe destacar la importancia de tener una vida activa, incluir rutinas de ejercicio que aportan numerosos beneficios, no solo en nuestra salud, sino también a nivel emocional. Aquí te dejo algunos de esos beneficios:

•  Ayuda a controlar el peso. Al realizar ejercicio físico, consumimos energía (calorías) y esto ayuda a mantener a raya el peso. No es necesario invertir horas en el gimnasio si no tienes tiempo, ni practicar ejercicio todos los días, puedes incluir rutinas en tu día a día que te ayuden a mantenerte activa, como por ejemplo subir las escaleras en lugar de coger el ascensor, ir andando a los sitios o aparcar más lejos para caminar, etc., lo importante es ser constante.
• Ayuda a combatir afecciones y enfermedades. Independientemente de si quieres mantener a raya tu peso, practicar ejercicio ayuda a prevenir enfermedades cardíacas y la presión arterial alta además de ayudar a reducir el colesterol malo y los triglicéridos lo que también es bueno para reducir el riesgo de enfermedades cardiovasculares y de padecer diabetes tipo 2.
• Mejora el estado de ánimo. Una sesión de ejercicio o una salida a caminar pueden ayudarte a aliviar la tensión acumulada durante un día estresante, ya que, estimula sustancias químicas cerebrales que hacen que te sientas más relajado, feliz y con menos ansiedad. También ayuda a que te veas mejor físicamente si lo practicas con regularidad, lo que puede aumentar tu confianza y tu autoestima.
• Aumenta la energía. Hacer ejercicio aumenta la masa muscular y, por lo tanto, la fuerza y la resistencia. Ayuda a que el sistema cardiovascular funcione con mayor eficacia.
• Promueve un descanso mejor y de calidad. El ejercicio hace que puedas dormir más rápido, que tu sueño sea mejor y que descanses profundamente.

Como ves, tanto tener una planificación de comidas como establecer una rutina de alimentación y de ejercicio pueden ser grandes aliados para mejorar la salud y el bienestar general. Es importante estructurar tu día a día e invertir un poco de tiempo para ahorrar tiempo, esa es la clave para poder organizarte y, por lo tanto, mejorar tu calidad de vida.

Al fin y al cabo, gastar unos minutos a la semana para elaborar un menú, te beneficiará física y mentalmente, ya que muchas veces tener que pensar cada día que cocinar hace que acabemos comiendo cualquier cosa, además de generar estrés y ansiedad. Ahora solo queda poner en práctica estos consejos que seguro te sirven de gran ayuda y que agradecerás a largo plazo, aunque en un principio tengas que esforzarte para aplicarlos.