Últimamente se ha popularizado el interés de todos por conocer qué relación existe entre la alimentación y la salud ya que, ha sido demostrado que infinidad de alimentos habituales como las frutas, las verduras, el pescado o la leche, son ricos en nutrientes que aportan beneficios muy importantes a nuestro organismo. Por lo que  cada vez son más prioritarios los alimentos funcionales.

A diferencia de los alimentos convencionales, los funcionales no solo proporcionan nutrientes esenciales, sino que ofrecen beneficios adicionales para la salud, ayudando a prevenir enfermedades, mejorando las digestiones, e incluso potenciando los niveles de energía. Esta tendencia es especialmente visible este año en el que la demanda de productos específicos como los probióticos, los aćidos grasos omega-3 y la fibra han incrementado su demanda considerablemente.

Cada vez son más las personas que buscan incorporar hábitos saludables en su rutina, por eso otra opción para mejorar tu salud es valorar seguir una dieta para adelgazar pautada por un nutricionista profesional o dietas personalizadas adaptadas a tus necesidades o objetivos.

Los alimentos funcionales, son una excelente opción para quienes quieren ir más allá de cuidar su cuerpo y su salud, por eso este artículo explica cómo pueden afectar de forma positiva los alimentos funcionales en nuestra calidad de vida y en la salud en general, ayudando en la prevención de enfermedades. Veremos los beneficios de algunos de estos alimentos específicos en la alimentación y cómo pueden influir en la digestión, el aumento de energía o en la prevención de patologías crónicas.

Beneficios de los alimentos funcionales para una vida saludable

Mejoran la digestión

Estos alimentos, tienen un impacto positivo en nuestra digestión ya que, ayuda a mantener un sistema digestivo saludable lo que mejora la absorción de nutrientes. Sobre todo los alimentos ricos en fibra o probióticos, pueden marcar una diferencia significativa en cómo nuestro sistema digestivo transforma y aprovecha los alimentos. Algunos de sus efectos sobre el sistema digestivo son:

• Regula el tránsito intestinal: la cantidad de fibra que contienen estos alimentos, sobre todo la fibra insoluble, facilita el paso de las heces por el intestino, ayudando a prevenir el estreñimiento y limitando los trastornos digestivos como la diverticulitis. Además, la fibra soluble, ayuda a regular el colesterol y la glucosa en sangre gracias al gel que forma en el sistema digestivo y que ayuda a tener una mejor digestión, más estable y saludable.
• Equilibra la microbiota intestinal: los alimentos como el yogur, kéfir y otros productos fermentados, son ricos en probióticos, y estos microorganismos vivos, promueven el equilibrio de la microbiota intestinal o flora intestinal.
• Reduce inflamación y malestar digestivo: los alimentos ricos en ácidos grasos omega-3 como los frutos secos, semillas o determinados aceites, tienen propiedades antiinflamatorias, especialmente beneficioso para personas que sufren enfermedades inflamatorias intestinales como la enfermedad de Crohn o la colitis ulcerosa.
• Mejora de la absorción de nutrientes: una microbiota equilibrada optimiza la digestión de los alimentos, permitiendo que el intestino absorba mejor las vitaminas, minerales y otros nutrientes.

Aumentan la energía

Los alimentos funcionales también afectan positivamente en los niveles de energía optimizando también el rendimiento físico y mental. Algunos de los factores mediante los cuales contribuyen a mejorar el balance energético son:

• Aporte de energía sostenida: los alimentos ricos en cereales integrales, ricos en carbohidratos complejos, liberan energía poco a poco en el cuerpo, evitando picos de insulina en sangre de manera brusca, por el contrario, la energía que proporcionan es más estable y duradera lo que ayuda a tener una sensación de vitalidad sostenida.
• Mejora del rendimiento mental y físico: los ácidos grasos omega-3 son beneficiosos para la salud cerebral, mejorando la función cognitiva, aportando claridad mental y concentración.
• Regula el metabolismo y estabiliza el azúcar en sangre: la fibra enlentece la absorción de glucosa en el intestino, evitando altibajos bruscos de azúcar en sangre, lo que es especialmente beneficioso para las personas que buscan mantener una alimentación consciente.

Previenen enfermedades crónicas

Al proporcionar nutrientes específicos y de alta calidad, los alimentos funcionales ayudan a limitar los problemas crónicos, no solo nutriendo sino ofreciendo propiedades terapéuticas, que, junto con una alimentación equilibrada, pueden ayudar a fortalecer nuestro organismo y a protegerlo de determinadas enfermedades. La inflamación crónica, es uno de los ejemplos ya que, está vinculada a numerosas condiciones de salud, incluyendo la diabetes y las enfermedades cardiovasculares.

La fibra que contienen alimentos como los cereales integrales y determinadas frutas, además de favorecer la digestión, ayudan a reducir el colesterol y mantener controlado el azúcar en sangre y contribuyen al adelgazamiento (puedes consultar una lista de alimentos que adelgazan aquí).

Por otro lado, los alimentos ricos en omega-3 como los frutos secos y pescados azules y los antioxidantes de frutas y verduras, también ayudan a combatir la inflamación contribuyendo a la reducción del riesgo de enfermedades.

Además, hay que tener en cuenta que en la alimentación vegetariana y vegana, hay que incluir este tipo de alimentos funcionales y prestar atención a algunos nutrientes que puedan requerir de una ingesta superior o suplementación, como puede ser el caso de la vitamina B12 ya que, suele estar presente en productos de origen animal y si no se planifica una alimentación completa en estos casos, suele ser común necesitar ayudarse de algún suplemento.

En definitiva, incluir alimentos funcionales en nuestra alimentación, es una manera eficaz y natural de ayudar a mejorar nuestra salud. Los beneficios que aportan estos alimentos, además de formar parte de una nutrición básica, ayuda a mejorar la digestión, aumentar nuestra energía y a reducir el riesgo de padecer enfermedades crónicas.

Por eso, a medida que se incrementa el conocimiento sobre la importancia de llevar una alimentación consciente, aumenta el interés por este tipo de alimentos ya que, es son fundamentales si quieres aprovechar al máximo los nutrientes que consumes y cuidar de tu bienestar general, por lo que no cabe duda de que la demanda de alimentos como los probióticos, alimentos ricos en omega-3, en fibra y en antioxidantes, seguirá creciendo y con ello dando un paso más hacia una vida más saludable y equilibrada.