En España, hay mucha costumbre de empezar el día con un desayuno típico de tostadas con companaje, pero resulta que la gran mayoría de los embutidos en el desayuno son ricos en grasas saturadas, las cuales no son saludables si se consumen habitualmente a no ser que elijas el mejor embutido de pavo.
Cuando una persona quiere cuidarse un poco, e incluso conseguir bajar de peso, suele cambiar el desayuno, pero a muchos no les gusta eliminar el pan, ya que acaba siendo el único momento del día donde lo consumen. Si es tu caso, y no sabes por dónde empezar con los cambios en tu alimentación, te aconsejo dietas para adelgazar de forma saludable por nutricionistas online.
Así que lo que se busca es cambiar el acompañamiento del pan, aunque también es recomendable prestar importancia al pan, optando por el consumo de panes elaborados con harinas integrales en lugar de elegir panes elaborados con harinas blancas. Los panes elaborados con harinas de grano entero, presentan gran cantidad de fibra y, por lo tanto, son más saludables para nuestro organismo, puesto que ayuda a mantener la salud intestinal.
Entre las distintas opciones se encuentran las tostadas vegetarianas donde se puede usar hummus, guacamole, aguacate, queso fresco, huevo y combinar con verduras como lechuga, tomate o pepino. Y también se pueden hacer opciones de tostadas con un toque dulce utilizando las cremas de frutos secos, sin azúcares ni grasas añadidas o alguna fruta dulce como el dátil o el plátano o la manzana asada. Pero también está la opción de utilizar embutidos como el lomo embuchado, el jamón cocido, el jamón serrano, atún natural o embutido de pavo.
Aunque cada vez es más frecuente que haya gente que se decante por la alimentación vegetariana, todavía hay muchas personas que se decantan por hacerse la típica tostada con embutidos, pero ¿sabemos identificar cuáles son los que nos convienen?
Tipos de embutido de pavo
El embutido es aquel alimento que está elaborada de carne de animales y podemos distinguir 4 tipos:
- Embutidos de carne. Son aquellos elaborados de carne y aquí están clasificados el chorizo, lomo, salchichón, salchichas, butifarras y sobrasada.
- Embutidos de vísceras. Son los que además de carne, también incluyen vísceras cocidas o encalladas como las sabadeñas, salchichas de hígado…
- Embutidos de sangre. Su característica principal es que tienen una consistencia más blanda y pueden ser crudos o cocidos y su principal ingrediente es la sangre acompañada de carne, vísceras, manteca, tocino y otros productos vegetales. Aquí podemos clasificar las morcillas y los diferentes tipos de botagueñas.
- Fiambre. Aquí clasificaremos los productos de variada composición, formados por carne de cerdo, vacuno, tocino y mezclas, pudiendo contener huevo, leche y especias como los fiambres de jamón de york, mortadela, etc.
Guía para elegir embutidos saludables
- Revisar los ingredientes. Es muy importante comprobar la composición de un alimento para saber si es saludable o no, para ello debemos revisar el listado de ingredientes sin necesidad de analizar los valores nutricionales. Para esto también hay que tener en cuenta el orden de los ingredientes, ya que van colocados del que más cantidad hay en el producto al que menos cantidad está presente, por lo que si el primer ingrediente es el pavo, por ejemplo, es porque el pavo es el ingrediente más presente en el producto.
- No te fíes del diseño del envase. Desconfiar de los envases en los que se indique de forma llamativa las palabras “bajo en grasa“, “natural”, “sin lactosa”, etc. El hecho de que lo indique en el envase no quiere decir que sea un procesado saludable si luego en los ingredientes podemos encontrar almidones, aditivos, azúcares, etc.
- Cuidado con la sal. Aunque en general no conviene abusar de los productos que contengan grandes cantidades de sal, para las personas que sufren problemas de hipertensión o retención de líquidos es muy importante que revisen la cantidad de sal que contienen este tipo de productos.
- Otro punto muy importante a tener en cuenta es la cantidad de pavo que incluyen estos fiambres. Es conveniente elegir aquellos productos que contengan un porcentaje de carne de entre un 80 y un 90% como mínimo. También es bueno conocer que no es lo mismo que indique en los ingredientes “fiambre de pavo” que “pechuga de pavo”, el fiambre suele ser de peor calidad, ya que contienen fécula, que no es otra cosa que harinas, almidón y productos similares y, por lo tanto, menor cantidad de proteínas por lo que la mejor opción será siempre la que indique pechuga de pavo.
Alternativas al Embutido
El embutido es un alimento procesado, por lo que conviene consumirlo de forma puntual y evitar incluirlo en nuestra dieta personalizada diaria. Hay otras alternativas mucho más naturales y saludables y que pueden aportarnos cantidades de proteína similares o incluso mayores y lo más importante, de mejor calidad. Estas opciones pueden ser:
- Huevos: los huevos son uno de los alimentos más nutritivos, incluye 6 g de proteína y 14 nutrientes esenciales, entre los que se incluyen vitaminas del grupo A, B, D y E y es una gran fuente de calcio, selenio y yodo, además es bueno para las personas que padecen anemia y falta de hierro
- Conservas de pescados: las conservas de atún al natural o sardinas son saludables, son ricas en ácidos grasos omega-3 y contienen gran cantidad de proteínas y vitaminas liposolubles como la A y la D y vitaminas del grupo B como la B2, B3, B6, B9 y B12.
- Pastas de legumbres o frutos secos: el humus, por ejemplo (elaborado a base de garbanzos en conserva) es rico en proteínas y fibra, al igual que la crema de frutos secos como la crema de cacahuete elaborada únicamente con cacahuetes.
El consumo excesivo de carne roja y de carne procesada, como es el caso de los embutidos, está relacionado con un incremento en el riesgo de padecer determinados tipos de cánceres, así como también aumenta las posibilidades de sufrir enfermedades cardiovasculares, exceso de peso y diabetes, por lo que la Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda reducir su ingesta y consumirlos de forma moderada y ocasional.
No obstante, lo mejor es llevar una alimentación saludable y equilibrada en la cual nos aseguramos de consumir todos los nutrientes y macronutrientes necesarios y limitar el aporte de alimentos que pueden perjudicar nuestra salud, por ello lo mejor es dejarse aconsejar por expertos en dietética que nos pueden orientar en nuestra nutrición sea cual sea nuestro objetivo (llevar una alimentación saludable, bajar de peso, alimentación adaptada a alguna patología, etc.)