Beneficios de las alcachofas
La alcachofa, una de las plantas medicinales estrella del invierno, es una de las verduras más depurativas y ricas en antioxidantes que ayudan a prevenir el desarrollo de enfermedades degenerativas. Su recolección abarca desde octubre donde también encontramos las calabazas hasta abril, y podemos consumirlas de temporada durante las estaciones de otoño e invierno. España es uno de los países con mayor producción de alcachofas, de hecho, es el segundo país más productor de esta verdura.
A la alcachofa se le atribuyen propiedades medicinales como beneficios vinculados al funcionamiento del hígado y la vesícula biliar, favorece la digestión y ayuda a eliminar toxinas por la orina. Además, es muy rica en fibra y ácido fólico que contribuye a la regeneración del cuerpo.
Es por ello que resulta muy recomendable en casos de enfermedades hepáticas, obesidad, colesterol y diabetes y se recomiendan encarecidamente en las dietas para adelgazar.
¿Qué nos aporta por cada 100 gramos?
- Calorías: 47 kcal
- Hidratos de carbono: 11 gr
- Proteínas: 3,3 gr
- Grasas: 0,1 gr
- Fibra: 5,4 gr
Propiedades de la alcachofa
- Tiene un gran poder alcalinizante gracias a su contenido en calcio, fósforo, magnesio y potasio.
- Aporta vitaminas del Grupo B (B1, B6 y ácido fólico) y vitamina C.
- Su acción antioxidante combate los daños de los radicales libres, previniendo o retrasando la aparición de enfermedades degenerativas y cardiovasculares.
- Tiene un alto contenido de fibra, la inulina, una sustancia prebiótica que aumenta la flora bacteriana intestinal y reduce la concentración del nivel de azúcar en sangre tras las comidas. Además, ayuda a prevenir y tratar el estreñimiento, favoreciendo el tránsito intestinal.
- Presenta una pequeña cantidad de sustancias como la cinarina que ayuda a proteger el hígado, ya que contribuye tanto a la formación de la bilis como a su liberación, favorece la regeneración de las células hepáticas y la digestión de las grasas.
Beneficios de las alcachofas
Tomar alcachofas tiene muchos beneficios, entre ellos:
- Protege tu hígado
Estimula la producción de bilis por el hígado, ayuda a mantenerlo sano y a digerir las grasas contribuyendo a combatir problemas como los gases y previniendo la formación de cálculos biliares. Un consejo para aprovechar sus beneficios: cuando hierbas, no tires el agua ya que este caldo además de ser muy depurativo le sienta fenomenal al hígado.
- Ayudan a reducir el colesterol
Algunos compuestos presentes en la alcachofa como la cinarina y las sesquiterpenlactonas, disminuye la formación del colesterol en las paredes de las arterias, previniendo la arteriosclerosis, e incrementan su expulsión mediante la bilis.
- Mejora la digestión
Cuando tenemos la sensación de estar lleno y nuestras digestiones son lentas o pesadas, la alcachofa nos ayuda a calmar esa sensación y a combatir problemas como la dispepsia o los gases, favoreciendo el tránsito intestinal.
- Tiene acción depurativa
Algunas sustancias ya mencionadas junto a su contenido en potasio favorecen la función renal y depurativa siendo recomendable para evitar la retención de líquidos y prevenir la hipertensión, el síndrome premenstrual, el exceso de ácido úrico, el reumatismo…
- Es hipoglucemiante
La alcachofa es un alimento ideal para personas con diabetes, ya que su contenido en inulina es un hidrato de carbono de fácil asimilación y se absorbe de forma gradual evitando los picos de glucosa y manteniendo los niveles de glucosa en sangre.
- Mejora problemas de la piel
Las alcachofas pueden mejorar algunas afecciones crónicas de la piel ya que al eliminar toxinas y excesos de grasa pueden mitigar enfermedades de la piel como el acné, la dermatitis o los eccemas.
- Ayudan a prevenir el cáncer
Su contenido en flavonoides y ácido cafeico parece que disminuyen el riesgo de contraer cáncer, especialmente de colon y de mama.
¿Cómo podemos utilizarla en la cocina?
Lo mejor a la hora de escoger las mejores alcachofas es tener en cuenta su peso, cuanto más pesen mejor. Además es importante que tengan sus hojas bien cerradas y que tengan un aspecto fresco. Cuando vayamos a cocinarlas debemos cortar parte de la base, y las puntas, arrancando las hojas exteriores que resulten más fibrosas.
Las alcachofas son un alimento ideal para incluir en ensaladas, como guarnición, plato principal, en tortilla o incluso en cremas.
Podemos utilizar diferentes técnicas culinarias: al horno, a la plancha, al vapor…es bueno que en el momento de cocinarlas las rociamos con un chorrito de limón para evitar que se oxiden debido a su contenido en vitamina C y flavonoides. Además para evitar que se resequen podemos añadirles un poco de agua, caldo o un chorrito de aceite de oliva.
A continuación, apúntate las siguientes ideas para que te animes a probar las alcachofas a través de diferentes combinaciones:
Tentempiés
- Tostada con paté de alcachofas, dátiles y limón
Ensalada
- Ensalada de mozzarella, alcachofas y tomates secos
- Ensalada de kale, alcachofas y avellana con aliño de menta
- Ensalada templada de caqui, canónigos y alcachofas
Guarnición
- Alcachofas a la plancha
- Alcachofas a la vinagreta
Arroz
- Arroz con alubias y alcachofas
- Arroz con champiñones, cebolla, pimiento rojo, alcachofa y guisantes
- Arroz con setas, alcachofa y cebolla
Huevo
- Tortilla con alcachofas
- Alcachofas rellenas de huevo y gambas
Guisos
- Garbanzos con alcachofas y huevo
- Guiso de alcachofas y patata
Pescado
- Merluza en salsa verde con corazones de alcachofa
- Alcachofas con gambas al limón
- Alcachofas con almejas
Cremas
- Crema de alcachofas
- Crema de chirivías y alcachofas
Opciones vegetarianas o veganas
- Tempeh con ajetes y alcachofas
- Trigo sarraceno con alcachofas
Las alcachofas son un alimento muy interesante y versátil en la cocina con infinidad de combinaciones. Podemos aprovechar la temporada de otoño invierno para consumirlas de temporada y aprovechar sus beneficios.
Además de consumirla como alimento, las hojas de alcachofa frescas se utilizan para hacer infusiones, tinturas, extractos líquidos, cápsulas y comprimidos. Estas hojas tienen principios amargos como: cinaropicrina, flavonoides, ácidos cafeico y clorogénico, sales minerales –potásicas y magnésicas–, y vitaminas C y B.
Sin embargo en caso de obstrucciones de los conductos biliares está contraindicada. Lo mismo sucede en embarazo y lactancia, ya que los principios amargos pueden pasar a la leche.En caso de litiasis biliar, lo mejor es consultar a tu médico antes de su uso.
Si necesitas ayuda para mejorar tu alimentación o simplemente quieres ideas para hacer tu alimentación más variada, no dudes en acudir a un dietista-nutricionista especializado. En Corporis Sanum te ayudamos a llevar una alimentación equilibrada adaptada a tus gustos, necesidades y estilo de vida.